! Mejora tu salud, vive como si tuvieras 20 años !

Creo que la comida que comemos, el aire que respiramos, el agua que bebemos, las actividades que realizamos, y nuestro estado de ánimo determinan nuestra calidad de vida. El cuerpo puede curarse a sí mismo cuando si está bien alimentado, sin embargo, hay factores genéticos, además de que a medida que envejecemos nuestro sistema inmunológico disminuye paulatinamente.

Buscando un complemento natural para todas las edades, encontré primero Mas Natural Salud y bienestar, de es una empresa mexicana que está rescatando la medicina herbolaria de nuestros ancestros.

100% natural, hecho a base de hierbas, frutas y vegetales.

Me siento afortunada de que a través de las Redes de Mercadeo (MLM) encontré la comercialización de productos naturales que funcionan y hacen funcionar maravillosamente nuestro cuerpo.

En mi desempeño como Distribuidora independiente, me convertí en usuaria activa de redes sociales como Facebook, Twitter, Linkedin, Google+, etc. Con ello reencontré a viejos amigos y encontré nuevos amigos.

Soy una principiante y sigo siendo un estudiante de esta industria MLM; siempre una alumna y con la esperanza de construir un negocio de mercadeo en red que me dé un crecimiento prometedor.

¡El mercadeo en red es una de las oportunidades de carrera de más rápido crecimiento en esta generación!

15 de mayo de 2010

"LA MEDICINA NATURAL"

"Mas Natural" Salud y Bienestar es una empresa 100% mexicana, interesada en  la riqueza de la medicina natural y herbolaria practicada por nuestros ancestros, lanza al mercado productos para la salud y el cuidado personal.

Las hierbas se utilizan desde hace siglos para atender enfermedades y su costo es menor que el de los fármacos, pero el rechazo de quienes respaldaron razonamientos cientificistas marginó su uso como medio de prevención y mejora a la salud, ya que no hubo investigaciones metódicas para revelar sus principios activos.
Se Define Herbolaria al conjunto de conocimientos relativos a las propiedades curativas de las plantas. Es la ciencia que estudia las propiedades y poderes curativos de la gran diversidad de plantas y hierbas que nos provee la madre naturaleza. Tiene sus orígenes en el origen mismo del hombre y en su necesidad de curar sus dolores, padecimientos y enfermedades. Desde sus inicios tanto las comunidades primitivas, como los egipcios, griegos y romanos tuvieron en la herbolaria el vehículo idóneo para cuidar su salud y tener una mejor calidad de vida, herencia que después se vio enriquecida de manera clave por la contribución del Lejano Oriente y sobre todo por la vastísima tradición herbolaria del Nuevo Mundo, en especial México. 
Nuestro país ha sido geográficamente privilegiado, ya que posee una de las floras más ricas en el planeta, su herbolaria se ha enriquecido por la observación y paciencia de los pueblos que durante siglos, han buscado el poder en la curación. La dieta de los mexicanos se modificó radicalmente después de la Conquista española; la herbolaria medicinal se enriqueció con la contribución de la flora europea y el árabe. De las cocinas españolas salieron el perejil, el tomillo, la albahaca, la manzanilla, la hierbabuena, el clavo, la mejorana, el laurel, el eneldo, y muchas más hierbas, aromáticas, de uso culinario y medicinal que llegó a México a través de la migración española. Según estudios botánicos modernos, más del 50 por ciento de las plantas medicinales actualmente empleadas por los mexicanos provienen de Europa y se integraron a lo largo de toda la etapa  colonial.

La medicina azteca es la que tuvo mayor importancia en el México antiguo, hay que recordar el poderío imperialista de esta cultura lo que conlleva a una concordancia cultural en la que, unos y otros pueblos, adoptan y acrecientan sus conocimientos para llegar a una rica medicina mesoamericana.
La plataforma de la vida era estar en armonía con la naturaleza, la religión azteca trataba, por sus fines y por su práctica, de atraer aquellas potencias naturales propicias a la existencia humana y de resistir las que hallaban dañosas.
También tuvo un gran nivel de progreso. Con su discernimiento de la naturaleza distinguieron propiedades benéficas a la salud en diversos minerales y plantas. Los sacrificios humanos religiosos (que incluían la extracción del corazón y el desmembramiento del cuerpo) ayudaron al conocimiento de anatomía.
Sabían curar fracturas, mordeduras de serpientes. Posiblemente hubo "odontólogos" encargados de realizar deformaciones dentales. Aunque la medicina era practicada por hombres y mujeres, parece ser que sólo las mujeres podrían encargarse de ayudar en los partos. La medicina estuvo muy ligada a la hechicería, pero el hecho de no atribuir la causa científicamente correcta a cada enfermedad no significó que no se aplicase el remedio conveniente.
Los sacerdotes poseían atributos sagrados y los poderíos divinos se mezclaban tanto en los orígenes como en el diagnóstico de padecimientos y derivado en su salud; cabe señalar que la medicina se desarrollaba en el plano sobrenatural.

El conocimiento fundamental de las propiedades curativas de las hierbas, así como del tratamiento inmediato de las enfermedades frecuentes, constituía parte de la sabiduría popular. 
Entre los indígenas, el arte de la medicina se enseñaba de padres a hijos y el aprendizaje empezaba siendo los niños muy pequeños. La razón es que, tanto para la interpretación de los signos adivinatorios, como para la aplicación de sustancias curativas, el universo de conocimiento es muy amplio. 

Los mexicas o nahuas, en el caso de las fracturas, suturaban la herida con pelo humano e inmovilizaban los miembros con cataplasmas que endurecían y al mismo tiempo entablillaban. Fray Bernardino de Sahagún escribe en su obra Historia general de las cosas de la Nueva España, recopilación de códices y de conversaciones con informantes indígenas elaborada entre 1569 y 1582, lo siguiente:
1. El médico verdadero: un sabio —tlamatini—, da vida.
2. Conocedor experimental de las cosas: que conoce experimentalmente las hierbas, las piedras, los árboles, las raíces.
3. Tiene ensayados sus remedios, examina, experimenta, alivia las enfermedades. 4. Da masaje, concierta los huesos.
5. Purga a la gente, le hace sentirse bien, le da brebajes, la sangra, corta, cose, hace reaccionar, cubre con ceniza las heridas.
6. El médico falso: se burla de la gente, hace su burla, mata a la gente con sus medicinas, provoca indigestión, empeora las enfermedades y a la gente.
7. Tiene sus secretos, los guarda, es un hechicero —nahualli—, posee semillas y conoce hierbas maléficas, brujo, adivina con cordeles.
8. Mata con sus remedios, empeora, ensemilla, enyerba”.

Los adelantos quirúrgicos de los antiguos mexicanos mediante el texoxotlalztli (cirugía) posibilitan curaciones (tepatiliztli), tratando heridas, úlceras, luxaciones, fracturas y algunos tipos de tumores. De igual modo, reducen y coaptan huesos rotos, utilizan tablillas como férulas (vapaltontli), y éstas son  sujetadas con correas de piel o tloxoctli, a semejanza de nuestras vendas. En cambio, para aliviar las heridas utilizan cabello limpio como sutura.
Las heridas se distinguen entre sí por la gravedad del daño.
Tlacolli es cualquier herida; temotzoliztli, el rasguño; viztli, la herida contusa; tlaxipeualiztli, la desolladura; teixiliztli, herida punzante y tlaxilli, la herida penetrante.
Desbridan abscesos y flegmones, utilizan cera para fijar injertos, atienden hemorroides, practican la circuncisión (texipincuayotlquiliztli), se atreven a realizar amputaciones y desarticulaciones. En forma por demás atinada emplean sangrías, teitzminaliztli o tecoliztli, gracias a la utilización de púas huecas de huitztlacuatzin, el puercoespín americano o de lancetas (tezoani, tezouani,
tecoaloni o teitzminaloni) de itztli, de punta de maguey o de unas cañuelas especiales. Conocen y atienden las quemaduras o tetlatiliztli, las mordeduras y picaduras de animales venenosos, las verrugas, las caries dentarias, el pterigión; aplican tópicos, antiflogísticos, resolutivos, calmantes y antídotos.
El solo hecho de poder efectuar este tipo de intervenciones nos habla de la habilidad y dominios de la técnica quirúrgica por parte de los cirujanos mexicas, comparable a la cirugía europea, practicada a fines de la Edad Media.
El uso de medicamentos con acción farmacológica, que se conseguían fácilmente en la zona dedicada para los preparadores y expendedores de los medicamentos y
plantas en el tianguis de Tlatelolco, lo que permite suponer que la terapéutica a base de estos remedios estaba al alcance de la población mexica y que, tal vez, como sucede en la actualidad, los propios herbolarios que vendían raíces y yerbas medicinales, así como los “boticarios” que expedían “medicinas hechas como
ungüentos y emplastos”, recomendaban el medicamento para cada determinada enfermedad, o el paciente, ya conociéndolo, lo iba a adquirir por sí solo. Posiblemente, el médico fuera consultado para los casos graves, que no
sanaban con la medicina adquirida en el mercado.

Herbolaria medicinal del Nuevo Mundo o Nueva España.
La gran variedad de medicamentos utilizados por los antiguos mexicanos, fueron de origen vegetal, empleados fundamentalmente en forma de cocimientos, macerados, polvos secos, píldoras o zanmotoloa, tlanoquiloni; sorbetorios, colutorios, buches, gargarismos
o paticanecamapacaliztli; lavatorios o nitetzinpamaca, lavativas o nitepamaca, fumigaciones, inhalaciones por la nariz o niteyacapocuia, zumos, cataplasmas, emplastos y unciones o tematiloliztli. Por tal motivo, no queda duda de la gran influencia manifiesta por las plantas del Nuevo Mundo o Nueva España, a partir del descubrimiento de las tierras de México y de la conquista, ejercitada en el
continente europeo por los conocimientos divulgados de Francisco Hernández. En el aspecto medicinal, el guayacán, la zarzaparrilla, la valeriana, la papaya, el
tamarindo, el árnica y otros elementos incrementan el arsenal medicamentoso de tipo herbolario.

El Códice Florentino hace referencia a una planta llamada cihuapahtli. Sus acciones estimulantes de la contracción del músculo uterino fueron valoradas por los nahuas empleándola como facilitador del parto y como emenagogo y abortivo. El mismo códice nos ilustra los usos medicinales del maguey al cual hay que rallar y moler su penca antes de cocerse y colocarse como emplasto, en el tratamiento de heridas. Se han corroborado sus acciones cicatrizantes y desinfectantes. Los mexicas allí encuentran una fuente inagotable de práctica, resultado del reparo cuidadoso y la reflexión sobre las propiedades de las innumerables plantas que crecen en sus dominios.
Vinculados a la natura y devotos del cultivo de las plantas, los mexicas denotan, aunque sea en forma rudimentaria, una disciplina sistematizada, taxonómicamente primitiva. Los grupos se conforman de acuerdo con los caracteres y las propiedades que poseen los vegetales. Entre los remedios o patli vegetales que utilizaban los nahuas señalan a cada ejemplar con un nombre compuesto o derivado, donde predomina la cualidad terapéutica más que la botánica. Originales, se adelantan a la obra magna de Carlos Linneo. A toda su
intuición sucederá siglos después la ciencia. Aunando esto, podemos decir que: de una gran cantidad de remedios o patli vegetales que utilizaban los nahuas ha podido verificarse la eficacia de muchos de ellos, quedándole por resolver a la investigación científica las características o principio activo, desde el punto de vista de la farmacoterapia indígena.
El conocimiento y progreso de los mexicas en la medicina y herbolaria no fue un hecho aislado, por el contrario, una vez resuelto el problema de la alimentación y el abrigo, la causa más importante para su subsistencia  constituye la  prevención y la curación de las enfermedades.



Para disminuir el estado sanguíneo de sus enfermos [...] 
y combatir las enfermedades inflamatorias [...]
[sacaban] sangre de la parte adonde tenían el dolor”, 
(Códice Durán, Tratado II, lámina 6).




Tarascos o Purépechas, utilizan el epazote para curar enfermedades de la piel y para desparasitar; la manzanilla para cólicos.

Los mayas, empleaban su medicina de diferentes formas. Las Plantas eran y son una fuente de curación usada abundantemente. También sabemos de varios nombres mayas para "especialidades médicas", cuyo nombre se relaciona directamente con una parte del cuerpo y la mente.
Los mayas tenían en cuenta las relaciones de su Calendario, Astronomía  y Astrología con la salud y enfermedad. La palabra " Xiú" se refiere a las plantas, "Ix Xiú", se refiere a la mujer que conoce su uso y " Ja Xiu", se refiere a un hombre que conoce el uso de las mismas. En maya la palabra, "MEN" se refiere a los procesos de la mente. Sería el correspondiente a la psiquiatría actual. Ellos pensaban que la mente era primordial y enfatizaban la unión de la mente y el cuerpo en el contexto de la salud. Una referencia a la mente muestra el vínculo con el espíritu, que no estaban separados en ninguna consideración médica, de nuevo "Ix Men" se refiere a los procesos que las mujeres pueden trabajar y "Ja Men" al hombre que las puede trabajar.
Otra palabra Maya, "PUL YAJ" es importante. "PUL" significa quitar y "YAJ" dolor. "Pul Yaj" se refiere a quitar los males en el lugar afectado.
Los Mayas practicaban el "UAY" , que trata de la enfermedad en su estado primario. "UAY" nos dice que algunas formas de enfermedad pueden deberse a disturbios de la persona interna. De nuevo, " Ix Uay" , y "Ja Uay" se refieren.

 A través del tiempo hemos visto que la herbolaria ha sido parte primordial en la rama de la medicina no únicamente en la rutina diaria de los habitantes de nuestro país sino a también de todo el mundo. En México su rica tradición se remonta a las épocas del imperio azteca y probablemente mucho tiempo atrás; examinando como ha progresado hasta el día de hoy, a pesar de la negación de la ciencia a aceptarla. También es importante ver como uno de los factores que hoy en día influye en los habitantes de este País es el que en  los mercados todavía existen puestos en los que se comercializan las hierbas y cada día su consumo aumenta entre personas de cualquier edad.

Fuentes consultadas:
·